miércoles, julio 31, 2013

Inverness (UK) – Loch Ness (UK) – Glenfinnan (UK).





9’10 h. – 15 ºC – 274 km recorridos.

Esta mañana nos levantamos más temprano ya que hoy hay varias visitas en previsión y queremos llegar a todas.
La primera es navegar por el Loch Ness, con lo que nos dirigimos al pueblo de Drumnadrochit, donde se concentran la mayor parte de los cruceros que salen al Loch. Paramos directamente en la Oficina de turismo, y allí mismo compramos los tickets para el barco. Nos indican donde debemos dirigirnos, y allá que vamos directos.
En la tienda donde nos cambian la factura que nos han dando en la Oficina de Turismo por el tiquet de acceso a un microbús que nos llevará al embarcadero, nos dan también una postal con lo que representa que es la primera foto hecha al habitante del Loch, y que según ellos, fue hecha por un navegante del lago, relacionado con lo que hoy en día es esta empresa de paseos en barco.
Hacemos tiempo para que sea la hora de salir hacia el embarcadero, y nos tomamos un café mientras tanto, bueno una piscina de café, y eso que siempre los pedimos pequeños…no quiero pensar cómo será un café largo….
El minibús llega puntual a las 11 horas, y nos transporta a nosotros tres, a un grupito de chinos, y a dos parejas más con una niña, que son españoles hacia el embarque. Allí nos espera un pequeño yate, pero donde nos instalamos todos muy bien. Se puede ir dentro de la cabina, fuera, y se puede subir a la parte de arriba también. El tiempo está muy nublado, pero la lluvia respeta por el momento el paseo. El capitán, que es la misma persona que el conductor del minibús, nos da a todos un dossier donde hay un pequeño resumen de los datos más relevantes, que a su vez él explica a través de un micro.
El lago tiene 37 km de punta a punta, y una profundidad máxima de 238 metros en la Eduards Deep, tiene más de 58 millones de litros de agua, y si toda esta agua se vaciara, en el hueco restante cabria tres veces la población mundial, digo yo que estirados y uno encima de otro no?
El lago tiene forma de bañera, con unas paredes verticales cercanas a las dos costas. No existen ningún tipo de túnel o pasadizo que lo comunique con el mar, y por tanto no tiene mareas. Sus aguas son muy oscuras, debido a las partículas de turba que se encuentran en suspensión en el agua, y que forman parte del lecho del lago.
Las vista mientras el barco avanza son espectaculares por todas las posiciones, y de vuelta, el capitán se acerca a la orilla para poder contemplar el Castillo de Urquhart, desde el agua. Simplemente alucinante.
El paseo dura una hora, y el cabo de este tiempo volvemos a estar en Drumnadrochit.
Estamos algo mosqueados porque de camino a Drumnadrochit hemos visto una vaca peluda, raza que únicamente se encuentra en Escocia, pero la hemos visto de pasada, y sin poder hacer fotos…..
Volvemos al coche y nos vamos dirección a Glefinnan….por el camino vamos pensando donde comeremos, aprovechando que empieza a ser la hora y que la lluvia aun no ha empezado a caer.
Al tomar una curva a la izquierda vemos que hay 5 ó 6 vacas peludas, que están haciendo las delicias de turistas rusos, y que justo al lado de donde ellas se encuentran hay un parquing, donde incluso paran los autocares (aquí les llaman couches), para que los turistas hagan las fotos de rigor.
Nos paramos a comer en este area de descanso, donde hay mesas “de cara a las vacas”, y después de hacer las fotos correspondientes y darle a la vaca hojas tiernas y trozos de manzana, seguimos ruta.
Aquí os pongo el nombre del pueblo donde están las vacas: Glenmoriston, y os regalo las coordenadas gps, para que vayáis directos, sin dar más vueltas: N57.21438 y W4.61692.





Llegamos al acueducto de Glefinnan, por donde pasa el tren que lleva a Harry Potter y sus compañeros a Hogwarts.
Cuando nos faltan 1 ó 2 kilómetros para llegar empezamos a ver el humo blanco que desprende la locomotora del tren, pero no tenemos tiempo de aparcar y acercarnos a ver pasar el tren…vaya, que desilusión.
Al otro lado de la carretera está el monolito erigido en homenaje al Príncipe Carlos Estuardo, no dirigimos hacia allá, cuando, antes de cruzar la carretera, vemos el humo blanco del tren otra vez….viene para acá…empezamos a correr los tres, para llegar al mirador donde se ve pasar al tren, y mucha otra gente, al vernos correr a nosotros…empieza a correr detrás nuestro.
Efectivamente el tren vuelve a pasar, y podemos fotografiarlo y grabarlo en video con detalle…Genial….ha valido la pena. Realmente se trata de la locomotora y los vagones que salen en las películas de la saga de Harry Potter, ya que los propietarios del tren, lo alquilaron para efectuar las tomas exteriores del tren en las películas.
Muy contentos y sonrientes vamos a ver el monolito del Príncipe Carlos, y al comprar el tiquet, nos dicen que se puede subir, pero que vayamos al tanto con la cabeza….Cuando llegamos, alguien nos indica que hay que esperar ya que solo pueden subir 6 personas cada vez, arriba hay muy poco sitio…esperamos nuestro turno, y empezamos a subir la escalera de caracol, bastante estrecha por cierto….Pero al llegar arriba, resulta que el acceso a la terraza es un cuadrado, relativamente pequeño, y al que tienes que acceder en vertical, poniendo los pies en salientes que hay ya preparados. Parece que estas saliendo de un submarino…..
Las vista son realmente muy bonitas, pero detrás nuestro empieza a subir gente, que al parecer no se ha enterado que solo 6 personas cada vez, y llega un momento en que somos 9 unidades, porque hay alguna de estas unidades que valen por varias….. por lo que en realidad somos 14 ó 15 personas. Llega un señor que yo creo que tranquilamente tiene 70 años, y se queda encajado en el hueco de acceso, el señor en cuestión ha subido con bastón…pero ya no cabe en el hueco para acceder a la terraza. Su compañeros se lo pasan de lo lindo, y se ríen todos un buen rato de la circunstancia, pero a nosotros no nos hace mucha gracia, ya que el Iaio no va ni para arriba ni para abajo.
Bueno, parece que el señor se cansa y dice que empieza a bajar, los demás se ríen, y nosotros aprovechamos enseguida para bajar detrás del abuelo….pero sin presionarlo, vaya a ser que no ponga bien un pie…..
Nos tomamos un café, una piscina, quiero decir, entre el monolito de Carlos Estuardo y el viaducto camino de Howards, y de vuelta ya hacia Inverness, paramos en Fort Williams.
Damos un paseo por el centro del pueblo, y empezamos a notar que algo nos pica, o cosquillea más bien la cara, nadie dice nada, pero de vuelta al coche, nos miramos los tres, y todos tenemos el mismo pensamiento….esos mosquitos minúsculos, llamados midge,  que no miden más de 2mm, pero que se lanzan a picarte, únicamente las hembras, se han aprovechados de estos pobres turistas….las picaduras son también minúsculas, y no tienen mayores consecuencias….pero nos han picado….
Vuelta al camping, donde encontramos una familia catalana (de Cambrils) con quién conversamos un buen rato, cena, partida de cartas, con aplastante victoria de los muchachos, y a dormir.

Mañana queremos llegar a John O’Groats, el pueblo más al norte de Gran Bretaña.

martes, julio 30, 2013

Inverness (UK) – Elgin (UK) – Destileria de Glennfiddich (UK).





10’20 h. – 17 ºC – 204 km recorridos.

Esta mañana nos hemos concedido un poco más de cama, y nos hemos levantado sin prisa, aunque con sorpresa, ya que las gaviotas han hecho de las suyas con la bolsa de la basura, y ha aparecido todo extendido por delante de la tienda, menos mal que solo había papeles y algún brick de zumo….
Salimos sin demasiada prisa, después de desayunar al sol que hoy también nos acompaña por la mañana, aunque por poco rato, ya que al atravesar Inverness, camino de Elgin, ya nos pilla el primer chaparrón del día.
Llegamos a Elgin y al llegar al punto de venta de la entrada de los tiquets, acabamos comprando el Explorer Pass, ya que aun tenemos varias visitas pendientes, que están contempladas en este pase, entre ellas el Castillo de Edimburgo.
La catedral es impresionante, lo poco que queda en pie, te deja entrever que tipo de edificación fue en su tiempo, y además, pensar en los constructores y albañiles de aquella época, que con poco más que sus manos y sus mentes, eran capaces de levantar semejantes catedrales e iglesias.
Hacia sol y las vistas han sido perfectas, ya que entre los arcos se veía el cielo azul y el sol.
Acabada la visita de la catedral, hemos hecho una visita al súper para reponer en la nevera, y hemos comido en un área de descanso camino de la destilería de Glennfidich



Al entrar en la zona de las destilerías, hay un cartel en la carretera que de te da la bienvenida a Moray, país de la malta y el whisky. Hay extensiones enormes de plantación, que yo he supuesto que debe ser malta, para el whisky.
Al llegar a las instalaciones de la destilería, nos dicen que la próxima visita sale en 5 minutos, pero que hay una siguiente en media hora aproximadamente en francés, con lo que esperamos a la visita en francés.
Muy chula, te explican todo el proceso, desde el principio, viendo la mezcla de la malta, el lúpulo y el agua, la fermentación con la levadura, el destilado pasando por la sala donde se encuentran los alambiques, y finalmente te enseñan donde está madurando el whisky, a la vez que te retan con el olor, de tres barriles de 20, 22 y 23 años a diferenciar el aroma de tres whiskys diferentes….con un resultado nulo por mi parte, aunque olían bien…..
La ultima parte de la visita es la degustación, y te sirven tres chupitos de whisky, de 12, 15 y 18 años, esta vez indicándote cual es cual, y la verdad es que los tres están sabrosos, aunque para mi gusto, el de 15 años es que más gustoso es. Yo me los he bebido los tres, sin dejar nada en la copa J.
Hemos vuelto de nuevo hacia Inverness, con la idea de pasar un poco por la ciudad y ver la Catedral de St. Andrew, pero hemos llegado con una lluvia intensa, por lo que hemos enfilado camino al camping.
Cena, partida de cartas, con paliza aplastante por parte del Oriol….y a dormir.
Mañana toca Loch Ness….a ver si hay suerte y Nessie se deja ver…


lunes, julio 29, 2013

Inverness (UK) – Isla de Skye (UK) – Inverness (UK).




8’50 h. – 13 ºC – 525 km recorridos.

Salimos temprano con el destino de la Isla de Skye, y con el sol, que nos acompaña desde buena mañana. El primer contacto que tenemos con el Loch Ness, nos llena de emoción al pensar donde estamos, paramos el coche, aunque hoy no toca esa visita, pero no podemos contenernos, y bajamos hasta la orilla del lago. Realmente, el subconsciente empieza a funcionar, y sientes una sugestión que te hace ver movimientos raros en el agua, y te pones en tensión como si de un momento a otro, un largo cuello fuera a emerger del fondo…le dicen la magia del Loch Ness.

Algunas fotos y seguimos hacia Skye, la primera parada la hacemos en el Castillo Urquhart,  queremos ver si nos encaja la visita, pero al llegar vemos una cola bastante larga de  gente que espera para la visita, y no podemos permitirnos ese tiempo, con lo que seguimos ruta.


Nos paramos en el Castillo de Eilean Donan, aparcamos al final del parquing, y nada mas bajar del coche, la grandeza del castillo al filo del lago Duich, nos deja literalmente boquiabiertos. Todos hemos visto este castillo en varias pelis, de ellas, quizá la más famosa Los Inmortales, pero no tiene nada que ver con la realidad. Es impresionante. Mientras hacemos fotos desde el parquing, ya que hay una buena vista, empieza a sonar una gaita, me deja sin palabras, y no sé porque, no puedo contener la emoción, es súper emotivo ver el castillo al borde del lago y escuchar la gaita….al acercarnos vemos a un chico, vestido con el Kilt típico, y que toca la gaita. Creo que esta será una de las mejores imágenes que voy a llevarme de Escocia. El castillo es precioso, aunque casi todo el interior es una reproducción, ya que fue arrasado.

Seguimos ruta y comemos en un área de descanso en el pueblo de Balmacara, la lluvia es un xiri-miri suave, y para justo el rato que nosotros estamos comiendo al borde del Loch Alsh.

Seguimos ruta y enseguida llegamos al puente que une la Isla de Skye con la gran isla que sería del Reino Unido, los tres tenemos la misma percepción, y por un momento la mente nos transporta a las islas Lofoten en Noruega, donde pasamos algunos puentes muy parecidos.
A partir de este momento, cualquier descripción que puede hacer del paisaje de la Isla de Skye se va a quedar corta, pero con diferencia….majestuoso, salvaje, armonioso y muchos otros adjetivos, a veces contrarios. El Old Man of Storr, una aguja de piedra que sale del suelo, con 50 metros, que dicen ser inescalables. El Kilt Rock, que forma parte de una zona de acantilados de paredes verticales que caen al mar y que fueron formados hace millones de años por un fenómeno volcánico , y al que llaman así, porque, según dicen, si te situas sobre ellos,  puedes ver no sólo la cascada, sinó que sus aristas verticales y colores los pliegues del kilt, típica falda escocesa. En el mirador hay una placa con huellas de dinosaurios que nos recuerdan que en esta zona se han encontrado rocas fosilizadas testigo de aquellos mastodontes por aquellos lugares.
Quiraing, donde al final se puede apreciar una vista, que creo es una de las más hermosas que he visto nunca.

Quiraing
Un paseo por Portree, que en gaélico significa puerto del rey, un pueblo encantador con casas de colores en el puerto.
El faro de Neist Point, donde te encuentras en la parte más saliente del territorio Ingles, sin tener en cuenta las Islas Hebridas. Con un paisaje también espectacular del mar y los acantilados que lo rodean.
Un día donde la retina ha trabajado mucho para poder grabar todos los paisajes que hemos visto, todos absolutamente maravillosos.
El tiempo ha sido entre nubes y sol, por la mañana, con sol en Skye, y con una tormenta después de cenar, en los últimos kilómetros antes de llegar a Inverness.

El día ha sido largo, nos paramos a cenar por el camino, ya que la llegada al camping será tarde, y cuando llegamos, pasadas las once de la noche, solo tenemos ganas de ponernos el pijama e irnos de cabeza a la cama.

domingo, julio 28, 2013

Abington (UK) –Inverness (UK)




9’15 h. – 14 ºC – 339 km recorridos.

Agua, agua, agua y más agua. Toda la noche ha estado lloviendo, y ahora cae con fuerza. Vamos a tomar un café latte al Starsbuck que está al lado del hotel, y la chica que nos sirve las dos piscinas de café con leche, nos dice que this is the scotland’s weather.

Bueno, hay que resignarse. Lluvia toda la mañana, con un paisaje alrededor precioso, pero que la continua lluvia impide que podamos apreciar en su esplendor, y por supuesto la cámara de fotos no trabaja lo que hubiese sido normal sin lluvia.
Comemos en un área de descanso, y la lluvia para un rato, parece que para dejarnos comer al aire libre observando todo lo que tenemos a nuestro alrededor.
Por el camino vamos preparando la estrategia para montar el comanche con la lluvia que cae, en el menor tiempo posible y evitando que se moje también lo mínimo posible, pero amigos, llegamos a Inverness y poco a poco deja de llover y cuando nos instalamos en la parcela que el amable Sr. Harry nos ha indicado, no cae ni gota de agua. Será un presagio?

Acabamos de instalarnos adecuadamente y sin prisas, vamos a liquidar la cuenta pendiente, y a preguntar la previsión metereoligica para mañana. Harry nos dice que el lunes y el martes serán buenos días, con poca lluvia, y también nos dice que para los turistas, la lluvia es siempre un drama, pero que Escocia es así, y que hay que admirarla con lluvia, sigue siendo igual de hermosa. Sus palabras nos hacen reflexionar…las cosas son como son, no como nosotros queramos que sean.

Cenamos, estrenando la temporada con una cena típica de la Familia Tragamillas de vacaciones….
Jugamos una partida de cartas, y vamos a dar un paseo por el camping. Hay poca señal de wifi, y están todos los jóvenes, enganchados a sus móviles y a sus tablets, alrededor de la recepción que es donde la señal es mas fuerte, cada uno mira hacia un lado diferente, y se mueve si escucha música, o se rie, si esta descargando whatsapp…parecen zombies….



sábado, julio 27, 2013

Calais (F) – Abington (UK)




6’45 h. – 18 ºC – 778 km recorridos.

Día de grandes emociones, con puntualidad británica (y nunca mejor dicho), estamos en la estación del Eurotunnel, poniendo la tarjeta con la que se hizo la reserva, el ordenador te da la opción de coger el tren que habíamos reservado, o bien el que sale inmediatamente antes, escogemos el primero porque vamos sobrados de tiempo…la maquina emite la tarjeta de embarque que viene con el correspondiente mecanismo para colgarla en el retrovisor interior del coche. Ahora a pasar la aduana, todos los coches van tirando sin problemas…llegamos nosotros a la aduana francesa y perfecto, adelante, pero llegamos a la aduana inglesa…y al entregar los pasaportes, el agente de aduanas no para de repetir “Andourrrra”…busca en una lista de países que tiene colgada en la pared, habla con un compañero, llama por teléfono, y acaba indicándonos que nos apartemos del carril y que esperemos un momento….mi estomago empieza a sentir un revoloteo de mariposas…el tipo se va con los tres pasaportes en la mano….se cruza con otro compañero y se para a hablar con él y le enseña nuestros pasaportes….pinta mal? Esto nos va a pasar en Francia? No puede ser….al cabo de unos minutos vuelve sonriendo, y supongo que al ver nuestras caras, lo primero que dice es que no hay ningún problema, nos ha puesto un visado de 6 meses para no tener ninguna problema en Reino Unido…que majo…vaya susto…nos desea good holidays…y seguimos adelante....vamos dirección al embarque, que hacemos en el último momento, a causa del periplo de los pasaportes.


Entras en el tren como si fuera la rampa de un parquing de un centro comercial, y dentro, un señor te indica hasta donde debes avanzar. Te pone una cuña en la rueda de atrás, y te recuerda que dejes el coche frenado, con la primera puesta y con los cristales bajados a media ventana.
El tren se pone en marcha y estamos al lado del coche….tras 35 minutos de travesía, llegamos a Folkestone, y salimos de la estación diciendo por la izquierda, por la izquierda…de momento el carril es de único sentido…al incorporarnos a la autopista se hace rarísimo ir por el lado izquierdo….y además utilizando el carril de los vehículos lentos, que es el de más a la izquierda.

Seguimos ruta con la intención de llegar como mínimo a Preston, y según discurra el día y el tráfico, hasta un poco más al norte. Cuando nos acercamos a la órbita de Londres, el tráfico se complica y hay algunas retenciones…pero seguimos tirando autopista al norte sin problema. Por cierto, la autopista, o “motor way” en Inglaterra es gratuita, como en Alemania.

Paramos en un área de servicio y tomamos un breakfast tradicional, es decir, un huevo frito, algunos beans, un tomate (pero de bote), una salchicha y un trocito como de puré de patata rebozado, con dos rebanadas de pan con mantequilla salada. El desayuno, a nosotros nos sirve de comida.
Seguimos adelante y como hay algunos tramos de obras, nos despistamos y nos salimos de la autopista sin querer, encontrándonos de golpe dentro de una rotonda…al revés, el gps recalculando la ruta, y los demás conductores con mala cara, porque damos una vuelta entera, hasta localizar la salida correcta, y repito…del revés.

Superado el bautizo de fuego con las rotondas inglesas, seguimos adelante, y como vamos bien de tiempo decidimos seguir mas la norte de Preston, vemos que en las áreas de servicio hay hoteles, paramos a tomar algo en una de ellas y nos acercamos al hotel a preguntar, la señora nos indica en un mapa el próximo hotel, y nos cuadra, así que decidimos dormir en el área de servicio de Carlisle, en el hotel señalado. Llegamos y está lleno porque hay un Festival en un pueblo cercano. El señor del hotel nos indica otro hotel a 30 km, de otra cadena, pero de iguales características, seguimos, allí la señora nos dice que ella también tiene el hotel lleno, pero es tan amable de llamar al siguiente hotel de la misma cadena, y nos reserva la única habitación que les queda disponible…increíble.
Recorremos los 75 km que nos faltan y llegamos al hotel, un poco cansados de madrugar, de llevar una hora más encima, y del saco que kilómetros que hemos llenado hoy, pero contentos porque eso significa que estamos más cerca de Inverness, para llegar mañana temprano y instalarnos sin prisa.


En la autopista hemos visto varios carteles luminosos que decían “heavy rain forecast Sunday”…mañana os explico.

viernes, julio 26, 2013

Chatellerault (Potiers) (F) – Calais (F)



9’00 h. – 20 ºC – 606 km recorridos.

Nos levantamos sin demasiada prisa, hemos tenido tormenta por la noche, y los truenos, y después los rayos nos han acompañado una parte de la madrugada.

 Antes de ir a desayunar, hemos estado viendo por la ventana de la habitación, dos conejos, que corrían por el césped cercano al hotel. Al principio eran muy “monos” y al final han acabado siendo unos conejos alienígenas, enviados en misión de reconocimiento a la tierra (la imaginación al poder), todo esto porque el más pequeño saltaba y levantaba las orejas, y se nos ha ocurrido que con el movimiento de orejas estaba enviando mensajes a su planeta….
Autopista todo el día, comemos en un área de servicio, de nuevo con nuestra manta-mantel, como señores.
Seguimos ruta, y poco a poco vamos viendo como el paisaje cambia….más llano, mucho cultivo, al principio de girasoles, y después de cereales como el trigo y el maíz.

Cerca ya de Calais nos pilla una tormenta impresionante, agua a cubos….como si de golpe hubieran abierto  
el grifo, pero vamos avanzando, a menos velocidad, pero sin parar, y al cabo de algunos minutos disminuye la violencia con la que cae el agua, pasando a una lluvia normal, y acaba por salir de nuevo el sol llegando a Calais.

Se huele en el aire la cercanía del mar, y se ven las gaviotas sobrevolando la zona.

Llegamos al hotel Ibis, reservado desde el mes de febrero, y sin problemas nos instalamos. Hacemos un reconocimiento del lugar y nos informamos acerca de cómo llegar mañana a la terminal del tren que nos llevara a Gran Bretaña. Vamos a cenar a un restaurante bufet cercano, y nos dirigimos al hotel. Mañana toca madrugar en serio, y aun hay algunas tareas que cumplir antes de ir a dormir.


jueves, julio 25, 2013

Andorra (AND) – Chatellerault (Potiers) (F)



7’35 h. – 20 ºC – 693 km recorridos.

La Familia Tragamillas vuelve a las andadas, empezamos el viaje a Escocia – Gales de 2013.
Jornada sin mucho interés. 

Salimos de buena mañana, y tras comprobar que el conductor no ha perdido ni un ápice de su práctica en la conducción con un remolque. Hay que recordar que desde la última vez han pasado 2 años. Encaramos el día con la intención de llegar a Poitiers.


Desayuno en una área de descanso de Bourgmadame, comida en una area de servicio en la autopista, habiendo pasado Montauban, debajo de unos toldos, instalados hábilmente para dar una sombra, que realmente se agradecía, y con la práctica que la Familia Tragamillas va adquiriendo a base de viajes, estiramos nuestra manta-mantel y comemos realmente bien.

Llegamos a nuestro destino de hoy sobre las 18’30h, por el camino hemos hecho la reserva en un hotel Ibis, ya localizado antes de salir de casa, y cenamos en una pizzería, cerca del hotel.
Seguimos aparcando al lado de los camiones de gran tonelaje….